Hemos instalado una nueva caldera de gasificación de leña, esta vez en la localidad alavesa de Langarika.

Nuria y Mikel disponían de una caldera de gasoil, la cual han decidido sustituir por una caldera de leña, modelo SH de la marca austriaca ETA. La potencia necesaria para su vivienda teniendo en cuenta las cargas térmicas de la misma, hacen que se haya seleccionado el modelo de 30 kW.

Para la acumulación de calor, se ha instalado un buffer de inercia de 2.000 litros de capacidad, lo que dará más autonomía a esta familia, posibilitando que en pleno invierno únicamente tengan realizar una carga de leña diaria. Así mismo en verano, raramente tendrán que encender la caldera para la producción de agua caliente sanitaria, ya que cuentan con una placa termosolar que proporcionará la energía necesaria para el consumo diario de ACS.

Se estiman unos ahorros anuales superiores al 70% con el cambio de combustible.

De esta forma, estos vecinos de Langarika, logran obtener energía térmica para su vivienda de dos fuentes totalmente renovables y ecológicas como la biomasa y la termosolar.